La verdad es que llevaba tiempo queriendo colgar esta entrada porque me quedó pendiente después de la de DC, pero ya se sabe que uno no siempre puede hacer lo que quiere.
Aquí tenéis un pequeño condensado de cosas que vimos en nuestro domingo por Philadephia, ciudad de Benjamin Franklin y Rocky al mismo tiempo. Qué cosas, ¿verdad? Lo cierto es que de confirmó realmente como un sitio lleno de contrastes. Y si no lo creéis, echad un vistazo a estas fotos:
Empecemos por algo histórico:
Aquí tenéis un pequeño condensado de cosas que vimos en nuestro domingo por Philadephia, ciudad de Benjamin Franklin y Rocky al mismo tiempo. Qué cosas, ¿verdad? Lo cierto es que de confirmó realmente como un sitio lleno de contrastes. Y si no lo creéis, echad un vistazo a estas fotos:
Empecemos por algo histórico:
El Independence Hall: sitio donde nació Estados Unidos. En este lugar se selló y firmó la Declaración de Independencia y se escribió la Constitución norteamericana.
Escondida por la ciudad se puede encontrar esta calle que te transporta vía camino adoquinado directamente al siglo XVIII.
Pero no sólo de historia se vive en Philadelphia:
Pero no sólo de historia se vive en Philadelphia:
Esto es una imagen de South Street, sitio imprescindible para probar la delicia local: los aceitosos Philly Cheese Steaks. No tiene nada que ver con el estilo que recuerda a los orígenes de los Estados Unidos de las fotos anteriores. Esta calle está llena de detalles peculiares que anclan a la ciudad con el mundo actual.
¿Y qué es el mundo actual en Estados Unidos? Pues rascacielos... y de eso también hay en Philly.
¿Y qué es el mundo actual en Estados Unidos? Pues rascacielos... y de eso también hay en Philly.
Para acabar, poned esta canción con el volumen a tope en vuestro ordenador, y decidme a qué famosa escena del cine corresponden estas escaleras, jejejejeje.
Y todo esto en un radio de pocos quilómetros. Personalmente, de ese viaje me quedo con Philadelphia antes que DC, pero algun@s compañer@s mí@s ya me han comentado que hicimos demasiado el guiri y quizás nos perdimos las zonas menos "aburridas" de la ciudad... en fin, ¡excusa para otro viaje!
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