Pasión deportiva, también en EE.UU.

Este pasado mes de enero me tocó hacer unos cuantos viajes de norte a sur (y vuelta) por la autopista 880 que corre paralela a la bahía de San Francisco. Durante los tediosos viajes a causa del tráfico (algún día tocará hablar del horrible tráfico por estas tierras), siempre había un momento para recordar que podría ser peor: podría ser un fanático del fútbol americano y sufrir porque mi equipo fueran los Oakland Raiders, uno de las peores franquicias de la liga NFL. Y es que no solo en España existe gente capaz de cualquier cosa por su equipo. Para muestra, los aficionados que recaudaron $7500 para poner un anuncio de protesta en el periódico Oakland Tribune y un pedazo de cartel publicitario a pie de la 880, al ladito del estadio de fútbol, tal que:

[Visto aquí]

[Traducido: Mr. Davis, haga lo correcto; por favor contrate a un manager general]

[Nota: Mr. Davis es el manager general y dueño del equipo]