¿La gasolina está cara?

Los estadounidenses están que trinan con los precios de la gasolina. Y, en su lugar, no es para menos. Estados Unidos, salvo honrosas excepciones como las grandes ciudades, es un país en el que se (ab)usa bastante (d)el coche y en el cual todo está diseñado para moverse en él. En la zona donde yo vivo, por ejemplo, raro es que las calles tengan aceras y, si las hay, raras veces se ve gente usándolas. Con una dependencia del coche así, que el precio haya aumentado de $2,20 el galón (aprox. 3,9 l.) a $3,00 en dos meses es una sangría para el ciudadano medio.

Aún así, seguro que más de uno se debe estar partiendo al comparar con el precio que tenemos en Europa, ¿verdad? Os hago los números: ahora mismo, el litro de gasolina "regular" (89 octanos) está a... ¡¡¡60 céntimos de euro!!! Lo cierto es que yo no soy de los que clama al cielo porque uno siempre se acuerda de los tiempos pasados... pero sí que se nota la subida, ¿eny?

Fijáos como estará el tema que el presi Bush dijo hace unos meses que "Estados Unidos es adicto al petróleo, que a menudo es importado de regiones inestables del mundo" y que el país debe "aplicar el talento y la tecnología de Estados Unidos (para)[...] mejorar nuestro medio ambiente considerablemente (sic), ir más allá de una economía basada en el petróleo". Sabiendo que Bush es algo así como un magnate del petróleo tejano, la cosa debe estar muy mala...

Y es que hasta el país más succionador de petróleo parece empezar a creerse que el futuro parece estar en el litio y en el hidrógeno, amigos...