Noche de yuyu


Pues sí, hoy es la noche de las brujas, la de los espíritus y los gritos de Jamie Lee Curtis. La noche en la que el personal se disfraza (bueno... los adultos lo hacen el fin de semana antes, que hay que trabajar). El Carnaval de los estadounidenses. La noche en la que los niños se juntan, cada cual con su bolsa, y, acompañados de padres en muchos casos, se pasean por las casas del vecindario pidiendo dulces al grito del famoso "trick or treat!" ("truco o golosina"). La noche en la que las empresas que se dedican a los Snickers, los M&M's o el Kit Kat hacen su agosto a base de vender versiones reducidas de sus productos, no vaya a ser que los niños engorden y haya que volverlos a enviar al campamento de adelgazamiento.

Pero, ¿de dónde sale esta celebración (en castellano y reducido aquí)? Pues parece ser que es de origen pagano: más concretamente, del Samhain celta. Esta festividad marcaba el final del verano y se creía que, por una noche, el mundo de los vivos y los muertos se comunicaban. Al parecer, era el momento en el que las familias podían conmemorar e, incluso, comunicarse con sus miembros fallecidos. Era habitual dejar comida en los portales de las casas para ayudar al tránsito de los muertos de vuelta a su mundo. De ahí la curiosa similitud con el hecho de que el 1 de noviembre sea el Día de Todos los Santos en la cultura cristiana, que algun@s asocian a un posible origen pagano de esta festividad.

Con el tiempo, y el toque básico de la maquinaria estadounidense, esto ha acabado en el actual Halloween. Aunque cambiemos los muertos por niños, disfrazados de monstruos la mayoría de casos, llamando a las casas pidiendo dulces, no deja de tener una reminiscencia de la fiesta original. Sin embargo, poca cosa más diría que se conserva, puesto que algo muy pagano, como son las hogueras, es poco habitual. Lo que no falta en las puertas de las casas son las calabazas vaciadas, talladas en formas variadas (con sus herramientas profesionales y todo) y con velas dentro. Las famosas Jack O' Lanterns (que también tienen su leyenda). En su momento, las velas podrían haberse usado para guiar el camino de los muertos, pero ahora sólo se usan para dar la atmósfera tenebrosa que requiere la ocasión de esta evolución de una fiesta con su encanto que ahora es sólo una más de esas en las que parece que lo único que importa el "treat".


NOTA: La foto que acompaña a la entrada la he encontrado en el perfil Flickr de darienne0404

2 aportaciones:

Anónimo dijo...

jojoojo, mi poder de persuasión va en aumento!
pedí un especial halloween y aquí lo tengo. eso me indica que cada vez puedo pedir más cosas.... que será lo próximo?,jijijuajauajauaauamauahahaajuaa (risa niño alemán)

Jordi dijo...

No te quejarás... no es una entrada. Son dos, que la anterior está relacionada con Halloween ;-)

¿Alguna petición más, bwana?